A DEFENDER LA DEMOCRACIA
OPINIÓN
Por Jorge Messeguer Guillén
Lunes 18 de marzo de 2024
En 2005 el entonces presidente Fox, utilizando a las instituciones del estado, principalmente a la entonces PGR, fraguaba el famoso desafuero en contra del entonces jefe de gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador. La verdadera intención era impedirle al jefe de gobierno contender en las elecciones presidenciales.
En ese momento lo que estaba en juego era la democracia; la posibilidad de sacar de la contienda al competidor mejor posicionado, impedir que estuviera en la boleta y que la gente pudiera decidir por quién votar era una política claramente antidemocrática.
El presidente Fox metido en la elección tratando de influir de hecho y por la vía del Derecho; por eso López Obrador le dijo en un mitin ya como candidato, la famosa frase: “ya cállate chachalaca”; ese exabrupto lo utilizó Calderón en su contra y le valió ganar la elección del 2006.
Se hicieron muchas movilizaciones en contra del desafuero, recuerdo en particular la del 24 de abril del 2005, entonces me encontraba presidiendo al PRD en Morelos, una marcha silenciosa que partió de la Glorieta del Ángel de la independencia hacia el zócalo capitalino. Fue de tal magnitud dicha marcha que el zócalo se encontraba completamente lleno y el contingente llegaba más allá de la Alameda, impresionante.
En Morelos rentamos más de 150 autobuses que se llenaron de simpatizantes organizados de los diferentes municipios del estado. Ese día la autopista de Cuernavaca a México era una interminable fila de autobuses rumbo al zócalo de la ciudad de México, una fiesta democrática.
Diecisiete años después, ya con López Obrador de presidente, se repitió otra de las marchas más nutridas de la historia, solo que esta vez el verdugo de la democracia no era Fox, era el mismo Andrés Manuel; el 13 de noviembre del 2022 salimos a la calle miles de ciudadanas y ciudadanos a defender a las instituciones democráticas, en especial al INE, del ataque feroz que desde presidencia se daba a través del famoso plan A que pretendía hacer del INE un instrumento del poder, como era antes en la época de militancia del presidente en las filas priístas.
Salimos nuevamente a marchar el 26 de febrero del 2023 para defender a las instituciones electorales y a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, sin las cuales el hoy presidente nunca hubiera llegado a serlo, contra el llamado plan B, y también lo hicimos recientemente el 18 de febrero para defender nuestra democracia.
Es evidente que no es la primera vez que la democracia está en riesgo, lo paradójico es que hace casi veinte años, el blanco de los ataques presidenciales es hoy quien pretende debilitar a la democracia por la vía democrática.
El presidente metido de lleno en el proceso electoral, la conferencia mañanera la utiliza para hablar de la elección, criticar a la candidata de la oposición y se atreve a decir que se está fraguando un “golpe de estado técnico”: ahora la “chachalaca” es él.
El dos de junio viene la madre de todas las batallas, la gran batalla por la democracia.
Ese día no se trata de votar por la derecha o por izquierda, eso no está en juego, se trata de elegir entre democracia y autoritarismo, ni más ni menos.
Pretenden hacer una elección de estado utilizando todo el aparato gubernamental; el mejor antídoto contra eso es que la ciudadanía libre salga a votar masivamente.
Defender la democracia tiene que ver con avanzar con instituciones sólidas, con la división de poderes, con órganos autónomos fortalecidos, y con la posibilidad de establecer un primer gobierno de coalición.
Avanzar hacia una democracia consolidada en donde las “chachalacas” queden solo en el anecdotario de la historia.
¡Este dos de junio todos a votar!