VULNERABILIDADES Y FORTALEZAS DE LA NUEVA GOBERNADORA
CINTARAZOS
Por Guillermo Cinta Flores
Martes 10 de septiembre de 2024
Ni duda cabe: Margarita González Saravia se perfila a convertirse en gobernadora constitucional de Morelos en condiciones políticas inmejorables. La toma de posesión se llevará a cabo, según los mandatos constitucionales, el 1 de octubre venidero. Faltan 20 días para el importante acontecimiento, de carácter histórico, pues no solo veremos la entronización de la nueva gobernadora, sino a la primera mujer al frente del Poder Ejecutivo.
¿Qué escenario le espera y cuáles serán sus principales vulnerabilidades, pero también sus fortalezas?
Margarita González Saravia estará obligada a mantener firmes las riendas de la administración pública estatal con el fin de que todas las actividades económicas permanezcan inalterables, generando mayor riqueza. Esa conducción del gobierno morelense coadyuvará a que la marcha en los tres órdenes de gobierno conserve su ritmo normal. Noten que incluí al gobierno federal, porque cualquier representante del régimen de Claudia Sheinbaum deberá abordar su agenda temática con la gobernadora, independientemente de lo que vayan a ejecutar al respecto con sus superiores a nivel central.
Las transiciones políticas de esta envergadura siempre enfrentan nuevos desafíos del crimen organizado. Por lo tanto, González Saravia encontrará un sistema de seguridad pública erosionado y otras vulnerabilidades, entre las que destacan el descontrol de la violencia; la complicidad de autoridades (sobre todo municipales) con el crimen organizado; los vaivenes en la incidencia delictiva; la cultura de la ilegalidad; la erosión de la figura gubernamental; la inequitativa distribución del ingreso en todas las regiones de Morelos; la parálisis de los 36 ayuntamientos debido a sus pésimas condiciones financieras; y la ineficacia burocrática en instancias de gobierno.
Del listado anterior de debilidades, me parece que la seguridad pública; el precarismo financiero de la entidad, en general; y la erosión de la figura gubernamental serán las partes neurálgicas de la nueva administración.
Sin embargo, la futura gobernadora constitucional posee fortalezas, entre las que destacan las siguientes (la conozco desde hace décadas y las puedo enumerar): alto sentido del compromiso; capacidad para delegar, para hablar en público y para responder preguntas difíciles; firmeza y mano dura cuando se requiera; conocimiento sobre quién es quién en el estado; buenas relaciones con la prensa; orientación hacia el trabajo duro; físicamente en buena forma; capacidad para el estudio rápido y habilidad para hacer sentir cómoda a la gente; inclusión, y congruencia en el pensar, decir y hacer. Es una mujer inclinada al diálogo, a la negociación con altura de miras (sin salirse de los principios legales) y muy, pero muy decente. Si le va bien a Margarita, le va bien a todo Morelos.