He aquí 10 síntomas de que tu novio te está convirtiendo en víctima de violencia de género
Control excesivo. La pareja quiere controlar con quién hablas, dónde vas, qué haces e incluso qué ropa llevas puesta. Este control puede disfrazarse de “preocupación” o “cuidado”, pero en realidad es una forma de dominar y limitar tu libertad.
Aislamiento social. La pareja te aleja de tus amigos, familia o actividades que antes disfrutabas. Te hace sentir que sólo debes estar con esa persona y que los demás no te entienden o te perjudican.
Celos desmedidos. Experimentas reclamos constantes sobre tus interacciones con otras personas. La pareja es posesiva y te acusa de ser infiel sin razón alguna, lo que genera desconfianza y ansiedad.
Desvalorización y humillación. Te menosprecia, ridiculiza o humilla, tanto en privado como en público. Puede criticar tu apariencia, tus opiniones o tus decisiones para hacerte sentir inferior o dependiente.
Manipulación emocional. Utiliza el chantaje emocional para hacerte sentir culpable, manipulándote para que hagas lo que él o ella quiere. Esto puede incluir amenazas de dejar la relación si no cumples con sus expectativas o demandas.
Violencia verbal o psicológica. El uso de insultos, gritos, intimidaciones o amenazas es una señal clara de abuso. Aunque no haya agresión física, la violencia psicológica puede ser devastadora y afectar gravemente la autoestima.
Agresiones físicas. Cualquier tipo de empujón, golpe, bofetada o cualquier contacto físico violento es un signo evidente de violencia en el noviazgo. Incluso si la agresión es ocasional o “leve”, es inaceptable.
Desigualdad de poder. La relación se basa en una clara desigualdad, donde una de las personas toma todas las decisiones importantes, mientras que la otra se siente incapaz de opinar o actuar por miedo a las represalias.
Presión sexual. La pareja te presiona o te obliga a tener relaciones sexuales o hacer cosas con las que no te sientes cómodo. Este tipo de abuso puede ser sutil o directo, pero siempre es una violación de los derechos y la autonomía personal.
Cambios en tu comportamiento o estado emocional. Si comienzas a sentir miedo, ansiedad, tristeza o aislamiento, o si cambias tu forma de ser para evitar conflictos o complacer a tu pareja, es una señal de que la relación no es sana.
Reconocer estos síntomas es crucial para prevenir que la violencia de género en el noviazgo continúe o escale. Si te identificas con alguno de estos signos, es importante buscar ayuda, ya sea a través de amigos, familiares o profesionales especializados en violencia de género.