Resurge el gusano barrenador en México; desafíos en Morelos y tensiones con Estados Unidos
El gusano barrenador del ganado (Cochliomyia hominivorax), una plaga que afecta a mamíferos al alimentarse de tejido vivo, ha sido un desafío histórico en México, incluyendo Morelos, donde se registraron casos en décadas pasadas.
Desde 1972, México y Estados Unidos colaboraron a través de la Comisión México-Americana para la Erradicación del Gusano Barrenador (COMEXA), logrando su erradicación en 1991 mediante técnicas como la liberación de moscas estériles producidas en Chiapas.
En Morelos, la plaga afectó al sector ganadero en el pasado, pero las medidas de bioseguridad y vigilancia implementadas por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA) han mantenido la región libre de la plaga en años recientes, aunque la amenaza persiste debido a su reintroducción en otras zonas del país.
Recientemente, la reaparición del gusano barrenador en Chiapas, Campeche, Quintana Roo y otros estados del sur de México ha generado preocupación, con más de 107 casos reportados en 2025, incluyendo un caso humano fatal en Chiapas. Esta situación ha desencadenado un debate con Estados Unidos, que suspendió las importaciones de ganado mexicano en noviembre de 2024 tras detectar un caso en Catazajá, Chiapas, y amenaza con nuevas restricciones si México no intensifica las medidas de control antes del 30 de abril de 2025.
Las autoridades estadounidenses han criticado limitaciones impuestas a vuelos de fumigación y aranceles sobre equipos, mientras México defiende su soberanía y asegura que implementa estrategias efectivas, como inspecciones con binomios caninos, baños larvicidas y la aplicación de ivermectina.
El impacto económico es significativo, especialmente para estados ganaderos como Chihuahua, Sonora y Tamaulipas, con pérdidas estimadas en millones de dólares semanales debido al cierre de exportaciones.
México, en colaboración con Centroamérica y la Comisión Panamá-Estados Unidos (COPEG), impulsa un plan regional que incluye vigilancia epidemiológica, control de movilización de ganado y dispersión de moscas estériles.
En Morelos, los ganaderos están en alerta, siguiendo recomendaciones de SENASICA para revisar heridas en animales y notificar sospechas de infestación. La situación subraya la necesidad de cooperación internacional, pero también tensiones comerciales, mientras México busca proteger su estatus fitosanitario y recuperar la confianza de Estados Unidos.