Va en serio el combate a políticos narcos de México en EE. UU.; revocan visas y cierran cuentas bancarias de la gobernadora Marina del Pilar Ávila y su esposo en San Diego
Marina del Pilar Ávila Olmeda, gobernadora de Baja California, y su esposo, Carlos Torres Torres, enfrentan un nuevo escándalo tras la revocación de sus visas de turista por parte del gobierno de Estados Unidos, anunciada este 10 de mayo de 2025, y el reciente cierre de sus cuentas bancarias en ese país.
Ávila, miembro del partido Morena, comunicó a través de redes sociales que la medida consular se aplicó primero a su esposo y, posteriormente, a ella, sin especificar las razones oficiales. Ambos han calificado la acción como un procedimiento administrativo derivado de disposiciones internas del Departamento de Estado, asegurando que no implica acusaciones formales ni investigaciones en México o EE. UU. Sin embargo, la falta de transparencia ha generado especulaciones y críticas, especialmente por parte del Partido Acción Nacional (PAN), que exige explicaciones claras debido a la relevancia de Baja California como estado fronterizo con fuertes lazos comerciales con California.
El cierre de las cuentas bancarias de Ávila y Torres en bancos como Wells Fargo y Bank of America, según publicaciones en redes sociales, se atribuye a sospechas de que los fondos depositados podrían provenir de actividades ilícitas. Aunque estas afirmaciones no han sido confirmadas oficialmente por las autoridades estadounidenses ni mexicanas, algunos usuarios en redes sociales han vinculado la revocación de las visas y el cierre de cuentas a posibles investigaciones del Departamento de Estado sobre nexos con el narcotráfico.
No obstante, estas acusaciones carecen de evidencia concreta en los reportes oficiales y deben tratarse como especulaciones. La gobernadora y su esposo han expresado confianza en que la situación se resolverá favorablemente, y Torres ha contratado a un especialista en derecho migratorio internacional para apelar la decisión o solicitar nuevas visas.
La causa precisa de estas medidas por parte del gobierno estadounidense sigue sin aclararse, ya que los registros de visas son confidenciales, según un portavoz de la Embajada de EE. UU.. El contexto binacional, marcado por tensiones entre los gobiernos de Donald Trump y Claudia Sheinbaum sobre temas como migración, tarifas y el combate al tráfico de fentanilo, podría haber influido en la decisión, especialmente considerando la reciente reunión de Ávila con el cónsul estadounidense en Tijuana, Christopher Teal, para discutir temas de seguridad y desarrollo económico.
Mientras Morena y los alcaldes de Baja California respaldan a Ávila, calificando el asunto como un trámite administrativo, la oposición insiste en que la gobernadora debe rendir cuentas. Este caso, inédito para una gobernadora en funciones de un estado fronterizo, subraya la complejidad de las relaciones México-EE. UU. y la necesidad de mayor claridad para evitar especulaciones que afecten la credibilidad de los involucrados.