Morelos registró ingresos históricos por remesas en 2024 y mantiene flujo positivo en 2025; grave daño si EUA impone aranceles a las divisas
En 2024, el estado de Morelos captó un total de 1,144 millones de dólares en remesas, equivalentes a aproximadamente 21 mil millones de pesos, según datos del Banco de México (Banxico). Esta cifra, aunque reflejó una ligera disminución del 0.4% respecto a los 1,149 millones de dólares recibidos en 2023, consolida a Morelos como un receptor clave de estos flujos, ocupando el puesto 19 a nivel nacional. Los municipios de Cuernavaca, Cuautla y Jiutepec lideraron la captación, con 191, 188 y 89 millones de dólares, respectivamente, destacando su importancia en la economía local.
El flujo de remesas, proveniente en un 96.6% de Estados Unidos, sigue siendo un pilar económico para las familias morelenses, representando más del 50% del presupuesto anual estatal. Sin embargo, a nivel per cápita, municipios como Jantetelco, con 70,999 pesos por habitante, y Miacatlán, Axochiapan y Jojutla, destacan por su alta dependencia de estos ingresos.
En el primer trimestre de 2025, Morelos recibió 263 millones de dólares en remesas, un indicador de la continuidad de este soporte económico, aunque a un ritmo menor en comparación con el total anual de 2024. A nivel nacional, las remesas alcanzaron un récord de 14,269 millones de dólares en el mismo período, con un incremento del 1.3% respecto al primer trimestre de 2024, lo que sugiere una tendencia de desaceleración influenciada por factores como la menor generación de empleos en Estados Unidos y políticas migratorias más restrictivas.
A pesar de los desafíos, las remesas continúan siendo vitales para Morelos, impulsando el consumo y el desarrollo local. Expertos advierten que, ante posibles endurecimientos en las regulaciones financieras y migratorias en Estados Unidos, será crucial diseñar estrategias que promuevan un desarrollo sostenible para reducir la dependencia de estos flujos.
La imposición de aranceles a las remesas hacia Morelos podría tener un impacto significativo en la economía local, dado que en 2024 estas representaron 1,144 millones de dólares, equivalentes a más del 50% del presupuesto estatal. Un arancel reduciría el monto neto recibido por las familias, disminuyendo su capacidad de consumo y afectando sectores como el comercio y los servicios en municipios clave como Cuernavaca, Cuautla y Jiutepec.
Además, podría desincentivar el envío de remesas desde Estados Unidos, principal origen de estos flujos, agravando la dependencia económica de comunidades como Jantetelco o Miacatlán, donde los ingresos per cápita por remesas son elevados. Este escenario obligaría al estado a buscar alternativas para compensar la pérdida de recursos, como el fortalecimiento de la inversión local o programas de desarrollo económico sostenible.