Otro crimen tiñe de sangre a Huitzilac; ultimaron al director del Deporte municipal, Carlos Eslava Dávila
El municipio de Huitzilac, Morelos, amaneció este sábado con el luto por el asesinato de Carlos Alberto Eslava Dávila, director del Deporte municipal y sobrino del alcalde César Dávila Díaz, quien perdió la vida tras un ataque armado presuntamente motivado por un intento de robo.
El funcionario viajaba en su vehículo Nissan Versa por el centro del pueblo cuando fue interceptado por sujetos armados, en un suceso que resalta la fragilidad de la zona ante la presencia rampante de la delincuencia organizada.
Este homicidio se suma a una escalada de violencia que ha convertido a Huitzilac en un territorio plagado de criminales, donde los ajustes de cuentas y los asaltos son pan de cada día.
Los hechos ocurrieron la noche del viernes 19 de septiembre alrededor de las 20:00 horas en la Avenida Cuernavaca, donde los agresores abrieron fuego contra el vehículo de la víctima, dejando también herido a su padre, quien acompañaba al director deportivo.
Inicialmente reportado como un presunto asalto, el incidente derivó en un doble atentado que movilizó a elementos policiacos y de la Fiscalía General del Estado de Morelos, quienes acordonaron la escena para recabar evidencias. Hasta el momento, no hay detenciones, y las autoridades locales han reforzado la vigilancia en el área, aunque la escasez de elementos —apenas 24 policías para todo el municipio— limita su efectividad.
El alcalde César Dávila Díaz confirmó el deceso de su sobrino esta mañana, expresando profundo dolor y exigiendo justicia a las instancias estatales.
La comunidad de Huitzilac, consternada, ha manifestado su indignación en redes sociales y ante las autoridades, demandando medidas concretas contra la ola de inseguridad que azota el pueblo.
Este crimen no solo enluta a una familia ligada al servicio público, sino que evidencia la vulnerabilidad de funcionarios y residentes en un entorno donde la impunidad fomenta la audacia de los grupos delictivos.
Huitzilac se ha consolidado como un foco rojo en Morelos, atrapado entre rivalidades de cárteles como La Familia Michoacana y al menos siete organizaciones más que disputan el control territorial mediante ejecuciones y narcolaboratorios ocultos.
En lo que va de 2025, el municipio acumula decenas de homicidios, incluyendo el de cinco personas en enero y dos jóvenes esta misma semana, derivados de “ajustes de cuentas” y colusiones criminales que involucran incluso a figuras locales.
Este nuevo atentado contra Eslava Dávila no es un hecho aislado, sino un recordatorio brutal de cómo la violencia criminal ha sometido gobiernos y comunidades enteras, dejando un panorama de desolación y miedo que urge intervenciones urgentes por parte de las autoridades federales.
