VIGILANCIA CONTRA EL TIMO INVISIBLE: POR QUÉ YA NO PODEMOS BAJAR LA GUARDIA

CINTARAZOS
Por Guillermo Cinta Flores
Martes 18 de noviembre de 2025
En México, durante los primeros diez meses de 2025, la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana han reportado más de 1.2 millones de números telefónicos bloqueados por estar vinculados a fraudes y extorsiones, un récord histórico que supera en 47 % la cifra del año anterior.
Las modalidades más comunes ya no son solo las clásicas “secuestros virtuales” o “préstamos inmediatos”; ahora los delincuentes usan inteligencia artificial para clonar la voz de familiares, envían mensajes de WhatsApp suplantando a bancos o dependencias gubernamentales, y aprovechan temporadas altas de consumo (Buen Fin, Navidad, Día de las Madres) para disparar sus ataques.
El daño económico estimado a nivel nacional supera los 18 mil millones de pesos anuales y, lo más grave, el 68 por ciento de las víctimas nunca recupera su dinero porque transfiere por medios irreversibles como OXXO, criptomonedas o tarjetas de regalo.
Por eso, la primera línea de defensa la tenemos cada uno de nosotros: nunca dar datos personales ni realizar transferencias bajo presión, colgar inmediatamente ante cualquier historia sospechosa y verificar siempre por canales oficiales. Una llamada de 30 segundos puede ahorrarnos años de problemas financieros y emocionales.
Morelos no es ajeno a esta tormenta. Entre enero y octubre de 2025, la Fiscalía General del Estado registró 412 carpetas de investigación por extorsión telefónica, lo que representa un aumento del 38 por ciento respecto a 2024. Cuernavaca, Jiutepec, Temixco y Emiliano Zapata concentran el 72 por ciento de los casos.
Los delincuentes han refinado sus guiones: llaman fingiendo ser empleados de la CFE amenazando con cortes de luz, se hacen pasar por familiares accidentados en carretera, o contactan a comerciantes con supuestas “deudas pendientes con el crimen organizado” exigiendo pagos inmediatos en tiendas de conveniencia.
En septiembre pasado, en Cuautla, una adulta mayor perdió 185 mil pesos al creer que su nieto estaba detenido en Estados Unidos; el timador usó una voz generada por IA que sonaba exactamente como él.
Autoridades estatales y la Policía Cibernética han intensificado campañas en tianguis, mercados y colonias populares, repartiendo volantes con la frase “Si te piden dinero por teléfono, cuelga y denuncia al 089”. También han instalado módulos de denuncia exprés en plazas comerciales y lanzado la aplicación “No + Extorsión Morelos” para reportar números en tiempo real.
La realidad es cruda: mientras la tecnología avanza al servicio del crimen, la única vacuna efectiva sigue siendo la desconfianza razonable. No contestar números desconocidos con lada extraña, activar el filtro de llamadas en el celular, hablar abiertamente en casa sobre estas modalidades y enseñar a los adultos mayores a no compartir nunca códigos de banca en línea son acciones simples que rompen la cadena del engaño.
En Morelos, donde la cercanía entre comunidades puede ser una ventaja, la prevención colectiva es nuestra mejor arma: si cada vecino conoce las tácticas, alerta a sus familiares y denuncia, los delincuentes pierden territorio. El teléfono dejó de ser solo un aparato de comunicación; hoy es la puerta de entrada más usada por el crimen. Cerrarla depende de nosotros.
