LA AUTOPISTA, EL PASAJE TAJONAR Y LAS NOVEDADES DE ENTONCES…

HUGO CALDERÓN Y MIKE CASTILLO EN “LA RAZA FM” MINNESOTA, EE. UU.
MIÉRCOLES 3 DICIEMBRE 2025
BUENOS DÍAS
Como siempre, entramos a CADA MAÑANA con todo y chinelos, desde Jiutepec, en el Estado de Morelos, para saludar a nuestros amigos y paisanos, a través de La Madre de Todas, hoy que es miércoles 3 de diciembre del 2025.
Gracias Mike Castillo, por permitirnos nuevamente estar en contacto con nuestros paisanos de allá y de acá.
Es el último mes del año, el más bonito, dicen algunos. El mas triste, advierten otros. Lo cierto es que estamos a 28 días de arrancar la última hoja de este 2025, que se fue rapidísimo… como un suspiro.
Por acá, andamos casi viendo pingüinos, por el frío. Ustedes, ya se acostumbraron, y hasta disfrutaron con las primeras nevadas de la temporada invernal.
Ya estamos más cerca de la Navidad, y vamos a recordar que, hace unos días, se cumplieron 73 años de la inauguración de la autopista “Miguel Alemán”, a principios de noviembre de 1952.
Platicando con algunos cuernavacos de antaño, recordábamos la tranquilidad de la capital morelense, en la década de los años cincuenta.
Algunos, decían que “sus padres mencionaban que Cuernavaca, después de los años 30, cuando retornó la actividad social y política a la capital morelense, era un pueblote”.
Todavía en la década de los 40, en Cuernavaca se disfrutaba de un “ambiente provinciano”, decían los turistas nacionales y extranjeros que empezaban a enamorarse de la tranquilidad de esta tierra suriana.
Por eso, algunos comerciantes y empresarios locales, pugnaron por “darle otra cara a Cuernavaca”, para que ya no dijeran que era un pueblote.
En 1948, en la calle Guerrero, la más comercial de la ciudad, se inauguró el moderno Pasaje Tajonar, muy cerca del mercado “Benito Juárez”, que estaba donde desembocaba la calle de Degollado.
El Pasaje Tajonar, era un lujo en pleno centro, decían los vecinos de las calles de Matamoros, No Relección, Clavijero, Arista.
Contaba con diversos establecimientos comerciales, muy exclusivos para ese tiempo.
Claro, muchos de ustedes que nos escuchan, se van a reír, porque actualmente, con el rollo de la globalización, y sobre todo después de la pandemia por el COVID, en el 2020, tenemos todo al alcance de la mano, con solamente hacer clic.
En el Pasaje Tajonar estuvo, por ejemplo, la Zapatería Lyta, con zapatos de alta calidad, a precios de México, como decía su propaganda. Y, “La Dama Elegante”, donde vendían vestidos y abrigos, pero su especialidad era la venta de equipos para novia, según decía su publicidad. Imagínense ustedes ¡abrigos en Cuernavaca!
También estaba la relojería “La Joya”, en donde se hacían reparaciones y composturas de todo tipo de alhajas con garantía. La Casa Benítez, con los mejores encajes, listones y estambres.
En la planta baja “El Triunfo”, con gran surtido de ropa y géneros, así como artículos para dama y caballero.
La Casa Guerra, vendía “los mejores casimires y trajes sobre medida”.
Luego, entonces, decían: Cuernavaca ya no era un pueblote.
Como siempre, por platicones se nos terminó el espacio.
Nos vamos a despedir con Nueva Navidad, con Thalía, tema estrenado el año pasado en Nueva York, donde la mexicana participó en el encendido del Árbol de Navidad.
Buen fin de semana.
Hasta el próximo miércoles.
Gracias por escucharnos y por leernos.
