ACAPULCO: DEVASTADO
CINTARAZOS
Por Guillermo Cinta Flores
Jueves 26 de octubre de 2023
Este miércoles, en Twitter, me conmovió leer un mensaje subido por el presidente municipal de Jojutla, Juan Ángel Flores Bustamante, bajo el siguiente tenor:
Y posteó una imagen con la lista de insumos que los morelenses podemos donar para ayudar a los hermanos guerrerenses, así como la ubicación del centro de acopio, en el Auditorio Juan Antonio Tlaxcoapan de Jojutla.
¿Quién mejor que Juan Ángel Flores Bustamante para recordarnos la fragilidad de nosotros, los seres humanos, cuando nos sacude la naturaleza reclamando sus espacios? ¿Quién mejor que él para hacer un llamado a la solidaridad con los hermanos guerrerenses en desgracia?
El alcalde jojutlense conoce a plenitud el dolor de haber perdido todo en el terremoto de 2017, que destruyó a Jojutla casi en su totalidad. A él precisamente, desde 2018 a la fecha, le ha correspondido enfrentar cualquier cantidad de problemas para conseguir la reconstrucción, la cual no se desplegó a la velocidad requerida por los propios damnificados. Imaginen el dolor de ver a miles de familias cuyas viviendas, en su mayoría humildes, fueron destruidas por el sismo y se quedaron a vivir durante muchísimo tiempo en albergues.
A través de noticieros de Televisa pudimos ver parte de la destrucción de Acapulco por el huracán Otis, que, de una tormenta tropical, en escasas horas se trasformó en meteoro categoría cinco, altamente destructivo. La noche de este miércoles y la madrugada del jueves, el huracán fue implacable contra todo el puerto y municipios aledaños. Hasta el momento de redactar la presente columna no se habían restablecido la energía eléctrica y las telecomunicaciones, amén de que las vialidades terrestres, verbigracia un enorme tramo de la Autopista del Sol, estaban intransitables.
Vimos aterrorizados, cubierta por el agua, la zona Diamante de Acapulco. Lo que fueron hermosos y lujosos hoteles e impresionantes desarrollos inmobiliarios, totalmente devastados. Pero en otro punto del puerto, en el “Acapulco viejo”, vimos imágenes del hospital Vicente Guerrero del IMSS donde, debido a la falta de electricidad, murieron casi una veintena de pacientes dependientes de aparatos y otros insumos. ¿Negligencia al no disponer de una planta emergente? Zoé Robledo, director general del IMSS, deberá responder.
Quienes hemos residido y trabajado en Acapulco, así como disfrutado de sus atractivos frecuentemente, debido a la cercanía del puerto con Cuernavaca, sucumbimos ante la emoción y lloramos. Fue espeluznante ver la famosa Avenida de las Naciones, en la zona Diamante, ¡toda bajo el agua y destruida en la mayor parte! Y la misma reacción tuvimos cuando observamos la destrucción en la Costera Miguel Alemán, desde la Glorieta de la Diana, hasta Hornos. Todo devastado. Legendarios hoteles destruidos. Es importante precisar que las escenas fueron parte del material periodístico transmitido por un reportero de Televisa desde Chilpancingo, porque no pudo hacerlo en Acapulco a falta de energía eléctrica.
Es decir: todavía falta por ver lo ocurrido por ejemplo en las inmediaciones del Aeropuerto Internacional de Acapulco, así como en la carretera que conduce hacia Barra Vieja y en otros municipios, por ejemplo Coyuca de Benítez, Atoyac, Benito Juárez, Tecpan de Galeana y otros más de la Costa Grande. Este miércoles, en noticieros nocturnos, vimos a habitantes desesperados de Xaltianguis, ante la destrucción de su precaria infraestructura. Estaban completamente incomunicados y sin agua potable.
Ahora viene la reconstrucción, para lo cual se necesitarán cientos de miles de millones de pesos, en tiempos en que el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) ya no existe. Tenía alrededor de 300 mil millones de pesos, mismos que fueron absorbidos por la Secretaría de Hacienda sin que se sepa a dónde fueron a parar. Es uno de muchos fideicomisos desaparecidos por el régimen de López Obrador quien, por cierto, ayer quiso viajar hacia Acapulco por tierra, quedándose varado en los puntos donde la Autopista del Sol estaba destruida. Fue espeluznante observar a AMLO y a los funcionarios de su gabinete de seguridad sin saber qué hacer. Lo bueno es que pronto apareció la maquinaria pesada para liberar esa importante autopista. Finalmente, AMLO estableció su centro de operaciones en la Base Naval de Icacos. Mucha, muchísima actividad deberán desplegar las brigadas de la CFE para restablecer cuanto antes el suministro de electricidad, amén de que en breve será necesario diseñar un puente aéreo ante los daños sufridos por el aeropuerto de Acapulco. Etcétera.
Estaremos atentos al desarrollo de los acontecimientos y después diremos.