BANDOLEROS DE AYER Y HOY
CINTARAZOS
Por Guillermo Cinta Flores
Miércoles 25 de septiembre de 2024
En el estado de Morelos, los “bandoleros” se refieren históricamente a grupos de personas que cometían actos delictivos, particularmente en el siglo XIX y principios del XX. Esos bandidos, también conocidos como salteadores o cuatreros, operaban en zonas rurales y montañosas, donde robaban a viajeros, saqueaban pueblos y cometían otros delitos.
La región de Morelos, con sus sierras y terrenos difíciles de vigilar, fue un escenario propicio para el desarrollo de este tipo de actividades. Entre los motivos que impulsan la presencia de estos grupos, se encuentran las difíciles condiciones sociales y económicas de la época, así como los conflictos políticos, como la Revolución Mexicana.
Uno de los bandoleros más famosos de Morelos fue Rubén Jaramillo, un líder campesino que, si bien comenzó como un revolucionario a favor de los derechos agrarios en las décadas de 1930 a 1960, fue acusado de liderar una banda armada que cometía acciones ilegales, lo que lo convirtió en una figura ambigua entre héroe y bandido.
A lo largo del tiempo, los relatos sobre los bandoleros en Morelos han pasado a formar parte de la tradición oral, entremezclando hechos históricos con leyendas, y reflejando una realidad compleja de pobreza, rebeldía y lucha por los recursos disponibles.
EL BANDOLERISMO SOCIAL
El bandolerismo social es un fenómeno histórico y social en el que grupos o individuos, conocidos como bandoleros, cometen actos de robo, asaltos y violencia, generalmente en áreas rurales, pero con un carácter particular: muchos de estos bandoleros eran vistos por las clases populares como figuras rebeldes, luchadores contra las injusticias sociales o defensores de los más oprimidos.
Este fenómeno ha sido recurrente en diversas sociedades a lo largo de la historia, especialmente en épocas de desigualdad económica, abusos de poder o en contextos de falta de ley y orden.
Los bandoleros solían surgir en regiones donde las condiciones de vida eran difíciles y donde la justicia no atendía las necesidades de la población pobre, convirtiéndose en una especie de “héroes populares”.
El término “Bandoleros en Morelos” se refiere a grupos de bandidos o forajidos que estuvieron activos en este estado, particularmente durante finales del siglo XIX y principios del XX. Estos bandoleros a menudo operaban en áreas rurales y eran vistos como criminales y, en algunos casos, héroes populares, dependiendo de la perspectiva de la población local.
Morelos, al ser una región con una importante presencia campesina y agraria, experimentó malestar social debido a disputas de tierras, desigualdades económicas y tensiones políticas. El bandidaje se hizo más prominente durante estos períodos, particularmente alrededor de la Revolución Mexicana (1910-1920), cuando la agitación social y los conflictos armados estaban generalizados.
El término también tiene un significado histórico, ya que puede referirse a grupos armados que se opusieron tanto a las fuerzas del gobierno local como a las autoridades federales, aprovechando el caos para promover sus causas personales o simplemente sobrevivir en un entorno social que cambia rápidamente. Algunos bandoleros estaban estrechamente asociados con movimientos revolucionarios, mientras que otros eran de naturaleza puramente criminal.
La figura del bandolero en Morelos puede romantizarse, retratándose como una figura rebelde que se alzó contra la opresión, mientras que otros lo veían como grupos peligrosos y sin ley. Esta dualidad es común en las narrativas históricas mexicanas, especialmente en regiones con profundas raíces revolucionarias, como Morelos, donde nació Emiliano Zapata, una importante figura revolucionaria.
Los bandoleros y la Revolución Mexicana (1910-1920) tienen una relación compleja y multifacética. Los bandoleros, que eran individuos o grupos dedicados al robo, secuestro y otras actividades ilegales, existían en México mucho antes de la revolución. Sin embargo, su papel y su percepción en la sociedad cambiaron durante y después de este conflicto.
- Bandolerismo antes de la Revolución Mexicana:
- En el México de los siglos XIX y principios del XX, el bandolerismo era un fenómeno común, especialmente en zonas rurales donde el control del gobierno central era débil. Los bandoleros, en algunos casos, eran vistos como héroes populares, ya que desafiaban la autoridad de los terratenientes o el gobierno que oprimía a los campesinos.
- Algunos de ellos llegaron a tener cierta aceptación social, pues protegían a los pobres o desafiaban a los grandes terratenientes o caciques, actuando en contra de la injusticia percibida.
- La revolución como catalizador:
- Durante la Revolución Mexicana, muchos bandoleros se unieron a las fuerzas revolucionarias. Los ejércitos de líderes revolucionarios como Pancho Villa y Emiliano Zapata reclutaron a estos bandidos o absorbieron sus tácticas, dado que conocían el terreno y eran expertos en la guerrilla.
- En algunos casos, los bandoleros actuaban por motivos similares a los revolucionarios: el descontento con la pobreza, la explotación de los campesinos y la concentración del poder en manos de unos pocos. Esto les permitió unirse fácilmente a las filas revolucionarias.
- La línea difusa entre bandoleros y revolucionarios:
- En la Revolución Mexicana, la distinción entre bandoleros y revolucionarios no siempre fue clara. Muchas veces, un mismo grupo podía ser visto como bandolero por sus enemigos y como héroe revolucionario por sus simpatizantes.
- Pancho Villa, en sus primeros años, fue considerado un bandolero, pero posteriormente se convirtió en un líder revolucionario clave. Su transformación de bandolero a líder militar muestra cómo la revolución absorbió a figuras con antecedentes en el bandolerismo.
- Para algunos, la revolución fue una oportunidad para legitimar actividades que anteriormente eran consideradas fuera de la ley. Las causas sociales y la lucha por la justicia dieron a muchos bandoleros una nueva narrativa que justificaba sus acciones.
- Bandoleros como símbolos de resistencia:
- La Revolución Mexicana también modificó la percepción de los bandoleros en la cultura popular. Muchos de ellos pasaron a ser vistos como luchadores por la justicia social, al desafiar a un sistema político y económico opresivo. De hecho, la figura del “bandolero revolucionario” ha sido inmortalizada en la literatura y el cine mexicano.
- Estos personajes fueron románticamente idealizados como figuras que luchaban contra la tiranía, aunque en la práctica sus acciones estuvieran más vinculadas al crimen que a la política.
- Después de la Revolución:
- Tras la consolidación del nuevo régimen en la década de 1920, muchos antiguos bandoleros que se habían unido a la revolución fueron marginados o eliminados si no se alineaban con el nuevo gobierno. El bandolerismo persistió en algunas regiones, pero las autoridades post-revolucionarias comenzaron a reprimirlo de manera más efectiva.
- El bandolero dejó de tener el mismo papel que durante la revolución, pues el nuevo gobierno centralizado intentó restablecer el orden en todo el país.
En resumen, los bandoleros jugaron un papel importante en la Revolución Mexicana, ya sea como actores directos en la lucha o como símbolos de resistencia popular. Durante la revolución, muchos de ellos fueron absorbidos por los ejércitos revolucionarios, y la línea entre el bandolerismo y la revolución a menudo fue borrosa. La revolución transformó tanto a los bandoleros como a la sociedad mexicana, creando una narrativa de lucha por la justicia que perdura en la memoria colectiva del país.
El bandolerismo en México ha tenido una evolución a lo largo de los siglos, y aunque en su origen se refiere a los grupos de bandoleros o forajidos que actuaron fuera de la ley, hoy en día el fenómeno puede relacionarse con otros tipos de criminalidad organizada que operan en el país.
El término originalmente describía a grupos armados que robaban en caminos rurales, atacaban a viajeros o tomaban propiedades, sobre todo durante los siglos XIX y XX, en épocas de gran inestabilidad política y social, como la Guerra de Independencia y la Revolución Mexicana.
En la actualidad, el bandolerismo ha sido sustituido o absorbido en gran parte por el crimen organizado, principalmente por los cárteles de la droga, las bandas de secuestradores y los grupos de extorsionadores. Estos grupos criminales no solo operan en las zonas rurales, sino también en áreas urbanas, y sus actividades incluyen narcotráfico, tráfico de personas, robo de combustible (huachicoleo), asaltos a transportes de mercancías y extorsión a negocios.