¿Cuáles serán los posibles rubros de conflicto en torno al Paquete Económico 2025? Aquí te lo informamos
LA CRÓNICA DE MORELOS. Jueves 21 de noviembre de 2024.
En Morelos, uno de los puntos de conflicto más prominentes entre el Ejecutivo y el Legislativo en relación con el Presupuesto de Egresos y la Ley de Ingresos para el 2025 sería la propuesta de nuevos impuestos. La introducción de gravámenes como la tenencia y un posible incremento en el impuesto a la nómina ha sido mencionada como una fuente de disputa en el proceso de análisis del paquete presupuestal. Estos nuevos o aumentados impuestos podrían ser vistos por el Legislativo como una carga adicional para los ciudadanos y las empresas, potencialmente afectando la economía local de manera adversa. La Secretaría de Hacienda deberá justificar la necesidad de estos ingresos adicionales, mientras que los diputados locales podrían resistirse a aprobar medidas que perciben como impopulares o perjudiciales para el crecimiento económico.
Otro posible foco de conflicto es la distribución del gasto público. El Ejecutivo podría proponer asignaciones presupuestales que favorezcan ciertos proyectos o sectores que no necesariamente alinean con las prioridades del Legislativo. Por ejemplo, si el Ejecutivo desea aumentar el gasto en infraestructura a costa de reducir fondos en educación o salud, esto podría generar desacuerdos significativos. La Legislatura, representando a diversos grupos de interés, buscará reasignar estos fondos para cumplir con sus promesas de campaña o atender a las demandas más urgentes de sus electores, lo cual llevará a intensas negociaciones o incluso a la modificación del proyecto de presupuesto antes de su aprobación. Al respecto, la titular de Hacienda, Mirna Zavala, tiene mucho conocimiento, pues fue diputada local cuando el Congreso aprobó el actual presupuesto de 2024.
La autonomía financiera y operativa de los municipios también será un tema de disputa. El Congreso de Morelos ha mostrado en el pasado la tendencia de proteger los recursos de ciertos municipios, creando fondos específicos para su desarrollo, lo cual podría no estar alineado con la visión de asignación de recursos del Ejecutivo. La creación o exclusión de fondos para municipios específicos podría ser vista como un desequilibrio en la distribución de recursos, generando fricciones entre los diferentes poderes sobre cómo deben distribuirse los ingresos federalizados y propios del estado.
Asimismo, la aprobación de modificaciones al presupuesto de egresos, como adecuaciones presupuestarias, podría convertirse en un campo de batalla. La Constitución local permite al Congreso realizar ajustes, pero si el Ejecutivo percibe que estas modificaciones interfieren demasiado en su capacidad de gobernar o administrar el gasto, podría argumentar que se está violando su autonomía. Esto se agrava si el Congreso realiza cambios significativos sin una justificación clara o sin el consenso del Ejecutivo, lo que podría llevar a conflictos legales o incluso a la anulación de dichas modificaciones por parte de la Suprema Corte de Justicia, como ha ocurrido en el pasado con leyes de ingresos y presupuestos.
El primer acercamiento de Mirna Zavala con los coordinadores de los grupos parlamentarios, este jueves 21 de noviembre, para discutir el Paquete Económico 2025 parece ser una acción positiva hacia la construcción de un presupuesto consensuado y equilibrado. Es alentador ver que desde el inicio del proceso presupuestal se busca el diálogo y la colaboración entre el Ejecutivo y el Legislativo, lo cual facilitará la aprobación de leyes de ingresos y egresos que respondan tanto a las necesidades del gobierno como a las expectativas de los ciudadanos. Sin embargo, aún resta por ver cómo se manejarán los desacuerdos y si este diálogo inicial se traducirá en acuerdos efectivos o si simplemente marcará el inicio de una serie de negociaciones intensas. A ver.