EL ALCALDE RETROEXCAVADOR: CUANDO EL PODER SE CONFUNDE CON UN JUEGO DE NIÑOS

CINTARAZOS
Por Guillermo Cinta Flores
Viernes 24 de octubre de 2025
En el pintoresco municipio de Emiliano Zapata, Morelos, donde el agua potable es un lujo comparable a un unicornio, el alcalde Santos Tavarez García decidió que su título de “líder comunitario” incluía un doctorado improvisado en maquinaria pesada. En un arranque de obras para la colonia Lomas de Trujillo, el edil no se conformó con cortar una cinta o posar con una pala simbólica: no, señor, él mismo tomó los controles de una retroexcavadora como si fuera el protagonista de una película de demolición. ¿El resultado? Un caos digno de payasadas circenses, donde el “primer golpe” simbólico se convirtió en un puñetazo al sentido común.
Imagina la escena, digna de un meme viral: el alcalde, rodeado de funcionarios tiesos como soldaditos de plomo y vecinos expectantes, sube al monstruo amarillo con la gracia de un elefante en patines. En segundos, su brazo mecánico –manipulado por manos que presumiblemente firman decretos, no palancas– embiste un poste de luz como si fuera un enemigo personal. El poste se inclina en un ángulo imposible, cables eléctricos chispeando como fuegos artificiales de fin de año, y la multitud entra en pánico total: gente corriendo, gritos ahogados, y un funcionario gritando “¡Cuidado, jefe!”. Videos del momento circulan por redes como un virus contagioso, capturando el poste tambaleándose sobre la cabeza de decenas, mientras Tavarez baja de la máquina con cara de “fue sin querer, quítensela”.
Por un milagro que solo San Emiliano Zapata podría explicar, nadie terminó frito en este numerito electrocutionario. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) irrumpió como bomberos en una fiesta, cortando el servicio y reemplazando el poste dañado para que el “evento” –irónicamente bautizado como inicio de la red de agua potable– pudiera continuar. Todo esto junto a la colonia Tres de Mayo, donde el ayuntamiento soñaba con celebrar progreso, no con un espectáculo de destrucción gratuita. ¿Prioridades? Parece que para Tavarez, gobernar implica más show que sustancia, convirtiendo una obra pública en un reality de “Sobrevive al Alcalde Loco”.
Ahora, mientras las burlas llueven en redes sociales como confeti en carnaval, los zapatenses se preguntan si el próximo “arranque” incluirá al edil pilotando un camión de volteo o, peor, un dron con explosivos. Tavarez García, que asumió el cargo con promesas de desarrollo y eficiencia, logró en un parpadeo lo que años de oposición no pudieron: ridiculizar su propia administración. Lección para ediles de pacotilla: dejen las retroexcavadoras a los expertos, o el agua potable llegará no solo con retraso, sino con chispas, cables sueltos y un alcalde convertido en meme eterno. ¡Prioridades, señor alcalde, o Zapata se convertirá en el municipio del “ups” permanente!
