El comercio ambulante, sobre todo en el centro de Cuernavaca, impacta de manera negativa la imagen citadina y la funcionalidad de la zona: Marcos Suárez
El secretario de Desarrollo Económico y Turismo de Cuernavaca, Marcos Manuel Suárez Gerard, señaló la necesidad de abordar el problema del comercio ambulante en el Centro de la capital de Morelos, destacando su impacto negativo en la imagen y funcionalidad de la zona.
Reconoció la complejidad del tema, ya que, si bien el ambulantaje es una fuente de subsistencia para muchas personas, genera problemáticas que afectan tanto a residentes como a visitantes. Suárez Gerard enfatizó que es fundamental encontrar un equilibrio para atender las necesidades económicas de los comerciantes informales sin comprometer la accesibilidad y el atractivo turístico del área.
El funcionario explicó que el comercio ambulante obstruye el flujo peatonal en el Centro de Cuernavaca, particularmente al bloquear banquetas, lo que obliga a los transeúntes a caminar por el arroyo vehicular, representando un riesgo para su seguridad.
Esta situación, según Suárez Gerard, deteriora la experiencia de quienes recorren la zona, un punto clave para el turismo en la ciudad. La acumulación de vendedores en áreas estratégicas también afecta la percepción de orden y limpieza, aspectos esenciales para posicionar a Cuernavaca como un destino atractivo.
Aunque no se detallaron medidas específicas, el secretario subrayó que el problema requiere un enfoque integral que contemple las diversas facetas del ambulantaje. La declaración refleja la intención de las autoridades de trabajar en soluciones que armonicen el derecho al trabajo de los comerciantes con la necesidad de mantener un Centro histórico ordenado y accesible. Este desafío, común en muchas ciudades mexicanas, pone en el centro del debate la regulación del comercio informal y su impacto en el desarrollo turístico y urbano de Cuernavaca.