El Derecho al Agua: realidad y desafíos en Morelos
LA CRÓNICA DE MORELOS. Martes 26 de noviembre de 2024.
Este 25 de noviembre de 2024, la presidenta Claudia Sheinbaum firmó el Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad, un evento significativo que reunió a los 32 gobernadores de México, junto con representantes del sector privado y académico, en el Parque Ecológico de Xochimilco.
Este acuerdo tiene como objetivo principal reconocer el agua como un derecho humano y no como una mercancía, enfatizando la necesidad de gestionar eficazmente este recurso vital. La presidenta destacó la importancia de poner orden a las concesiones de agua, eficientar su uso, especialmente en el riego agrícola, y mejorar la infraestructura hídrica para asegurar un acceso equitativo y suficiente a agua de calidad para todos los mexicanos.
El texto constitucional que respalda este derecho se encuentra en el artículo 4 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que establece que “toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible”. Este marco legal obliga al Estado a garantizar este derecho a través de políticas y leyes que promuevan el acceso equitativo y sustentable a los recursos hídricos, considerando la participación de todos los niveles de gobierno y la ciudadanía.
Para Morelos, este acuerdo tiene implicaciones directas y positivas. La gobernadora Margarita González Saravia ha firmado en representación del estado, comprometiéndose a trabajar en conjunto con la federación para garantizar que el agua llegue con calidad al pueblo. La participación de Morelos en este acuerdo no solo reafirma la soberanía alimentaria a través de una mejor gestión del riego, sino que también aborda los desafíos locales de escasez y contaminación de agua, impulsando proyectos de infraestructura y saneamiento que son cruciales para el desarrollo sostenible de la región.
En términos de repercusiones, Morelos podría beneficiarse de la tecnificación del riego, que se planea financiar con una inversión de 9 mil millones de pesos en 2025. Esta tecnificación no solo aumentaría la productividad agrícola, sino que también promovería un uso más eficiente del agua, reduciendo el estrés hídrico y contribuyendo a la conservación de los recursos naturales. Además, el acuerdo propone acciones como la recuperación de concesiones y el saneamiento de ríos, lo cual es vital para una entidad como Morelos, conocida por sus zonas agrícolas y su dependencia del agua subterránea.
Finalmente, este acuerdo plantea un cambio de paradigma en la gestión del agua en México, alineándose con políticas ambientales más sostenibles y con un enfoque en la justicia social y la equidad. Para Morelos, esto significa una oportunidad para fortalecer su infraestructura hídrica, mejorar la calidad del agua disponible, y asegurar su distribución de manera justa y eficiente. El compromiso de la gobernadora y la colaboración interinstitucional abren la puerta a un futuro donde el acceso al agua no solo sea un derecho en el papel, sino una realidad tangible para todos los morelenses.