El fin de semana regresó el programa “Conduce sin Alcohol” o alcoholímetro del ayuntamiento de Cuernavaca
El programa “Conduce sin Alcohol”, conocido popularmente como el alcoholímetro, ha vuelto a implementarse en Cuernavaca, Morelos, con el objetivo de reducir los accidentes viales causados por el consumo de alcohol.
Este fin de semana, el operativo se reanudó después de haber sido suspendido temporalmente por condiciones climáticas adversas. Javier Tencle, director de la Policía Vial de Cuernavaca, informó que durante el fin de semana se revisaron a 19 personas, de las cuales seis excedieron el límite permitido de alcohol en la sangre, resultando en sus vehículos siendo remitidos al depósito. Este programa busca no solo sancionar a los infractores, sino también promover la conciencia social sobre los peligros de conducir bajo los efectos del alcohol.
La Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano (SEPRAC) ha estado trabajando en la implementación de este programa desde 2022, con un enfoque no solo punitivo sino también preventivo y de apoyo social. Además de las multas económicas y el arresto administrativo, se ha incluido la asistencia psicológica para aquellos conductores detectados con niveles de alcoholismo, con la intención de ayudarles a superar esta problemática. Este esfuerzo refleja un compromiso más amplio de la administración de Cuernavaca para combatir las adicciones y mejorar la seguridad vial en la ciudad, aprovechando los datos que indican que numerosos accidentes están relacionados con la ingesta de alcohol.
La implementación del alcoholímetro en Cuernavaca ha sido respaldada por diversas dependencias municipales y por la iniciativa privada, incluyendo a taxistas certificados del programa “Taxi Seguro”. Esta colaboración busca ofrecer alternativas seguras para el regreso a casa de las personas, minimizando el riesgo de que conduzcan bajo los efectos del alcohol. La coordinación con la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México también ha sido solicitada para asegurar que el programa se aplique con apego a los derechos humanos y de manera efectiva.
El retorno del alcoholímetro ha sido recibido con diferentes reacciones en la comunidad. Mientras algunos aplauden las medidas por la seguridad que aportan, otros critican la falta de un lugar específico como “El Torito” en Cuernavaca para la detención de conductores ebrios. No obstante, las autoridades municipales, conscientes de estos puntos de vista, continúan promoviendo el programa como una medida integral que no solo busca sancionar, sino también educar y prevenir, con la esperanza de reducir significativamente los accidentes de tránsito causados por el alcohol en la ciudad.