EL IMPUESTO A LA PLATAFORMA AIRBNB EN MORELOS
CINTARAZOS
Por Guillermo Cinta Flores
Viernes 22 de noviembre de 2024
La propuesta del gobierno de Morelos de implementar un impuesto a las plataformas de hospedaje como Airbnb tiene varias repercusiones potenciales tanto para la economía local como para los usuarios y anfitriones.
Esta medida podría generar un aumento en los ingresos fiscales para el estado, destinados a áreas prioritarias como la promoción turística y el desarrollo de infraestructuras. Sin embargo, también existe el riesgo de que este impuesto se traslade al precio final del alojamiento, lo cual afectará la competitividad de Morelos como destino turístico al incrementar los costos para los visitantes. Esto llevaría a una disminución en la demanda de alojamientos a corto plazo, especialmente si los turistas optan por destinos que no apliquen este impuesto o que tengan alternativas más económicas como los hoteles tradicionales.
Desde la perspectiva de los anfitriones de Airbnb, esta nueva regulación pudiera significar una reducción en sus ganancias netas, ya que tendrían que pagar este impuesto adicional. Aunque algunos verán esto como una forma de nivelar el campo de juego con los hoteles, que ya están sujetos a diversos impuestos, otros podrían considerar que es una carga adicional que afecta la rentabilidad de su inversión. Este impuesto podría desincentivar a nuevos anfitriones a unirse a la plataforma o incluso provocar que algunos de los actuales consideren salir del mercado si el margen de ganancia se vuelve demasiado estrecho. Asimismo, la regulación llevará a una mayor formalización de la oferta de alojamiento, lo que mejorará la calidad del servicio al obligar a los anfitriones a cumplir con ciertos estándares establecidos por la ley.
Para los turistas, la introducción de este impuesto cambiará la percepción de valor del hospedaje en Airbnb. Si bien la plataforma se ha popularizado por ofrecer alojamientos a menudo más económicos y con un toque local, un aumento en el costo podría hacer que algunos prefieran regresar a opciones tradicionales de hospedaje o buscar destinos alternativos. Esto impactará negativamente en la diversidad de la oferta turística de Morelos, ya que parte del atractivo de Airbnb es su capacidad para proporcionar experiencias únicas y personalizadas que los hoteles a veces no pueden igualar. No obstante, si los fondos recaudados de este impuesto se destinan efectivamente a mejorar la infraestructura turística, podría también mejorar la experiencia general del visitante en la región.
La regulación de Airbnb en Morelos podría tener efectos indirectos en la economía local. Por un lado, fomentaría prácticas fiscales más justas y transparentes, lo que sería visto positivamente por el sector empresarial y los ciudadanos que desean una mayor equidad en la competencia entre diferentes tipos de alojamiento. Por otro lado, si la medida lleva a una reducción en el número de turistas que utilizan Airbnb, esto afectará negativamente a los pequeños negocios locales que dependen del turismo, como restaurantes, tiendas y servicios de transporte, que podrían ver una disminución en su clientela. La clave para minimizar los impactos negativos será una implementación cuidadosa del impuesto, asegurando que la recaudación se utilice de manera efectiva para mejorar la oferta turística y apoyar a los negocios locales. A ver.