EUGENIO GARZA SADA: VÍCTIMA DE UNA IZQUIERDA EQUIVOCADA
ENTRE SEMANA
15 de septiembre 2025
Eduardo Ángel Cinta Flores
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A propósito de fechas septembrinas en las que celebramos nuestra independencia, lamentamos los terremotos de 1985 y 2017 y lamentamos también que, en la mañana del 17 de septiembre de 1973, primero la ciudad de Monterrey y después México fueron sacudidos por un hecho que marcaría a muchas generaciones: el asesinato del empresario y filántropo Don Eugenio Garza Sada.
Sin duda una de las figuras empresariales más influyentes del país, su muerte hace 52 años, a manos de un comando armado denominado “La Liga Comunista 23 de septiembre” generó conmoción nacional. El atentado no solo puso fin a la vida de uno de los principales impulsores del desarrollo económico y educativo del norte de México, sino que también reveló tensiones sociales profundas que se vivían en la época.
Fundador del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, el TEC, una institución que hoy es referente académico en América Latina. Don Eugenio fue líder del conglomerado Valores Industriales, S.A., VISA y fundador de la Cervecería Cuauhtémoc, S.A con su cerveza icono Carta Blanca, ahora parte de Heineken México, produciendo una amplia gama de cervezas, como Tecate, Dos Equis, Indio, Sol, Bohemia y la exquisita Noche Buena.
En otros ramos creó Hojalata y Lámina Grupo HYLSA, Malta, Empaques de Cartón Titán, Fábricas Monterrey, empresa dedicada a la producción de envases metálicos y cierres herméticos de diversos tipos, lo vivimos cotidianamente al abrir una lata de refresco o de cerveza. Bajo su liderazgo, el grupo llegó a contar con 90 empresas y más de 33,000 trabajadores a inicios de los años 70.
La Liga Comunista 23 de septiembre, era una organización guerrillera de izquierda radical, de corte marxista leninista, surgida a finales de los años 60, integrada por jóvenes universitarios y activistas, entre ellos el hijo de Rosario Ibarra Vda. De Piedra, que rechazaban como autoritarismo a la rectoría del régimen priista. Para ellos, empresarios como Garza Sada en Monterrey e Ignacio Aranguren en Guadalajara representaban los intereses del “capitalismo opresor”.
El entonces presidente Luis Echeverría Álvarez tuvo conocimiento del plan para secuestrar y asesinar a varios empresarios mexicanos. Su omisión confirmó la especulación sobre su evidente complicidad exhibiendo la negligencia deliberada del Estado.
En 2019, AMLO afirmó que ningún acto de corrupción ocurre sin el conocimiento del presidente y que las “transas más grandes” se hacían desde arriba. Con esta aseveración, en el caso del huachicol fiscal la pregunta surge, ¿qué tanto supo el entonces presidente López Obrador y qué tanto sabe la presidenta Sheinbaum del involucramiento de los parientes incómodos?
Es triste y lamentable ver que la única institución que se mantenía sin mancha en el gobierno federal de todos los tiempos, no solo del actual, la Marina, ha sido corrompida desde hace unos cuatro años en que surgieron los primeros eventos delatores de los elementos que se habían viciado junto con, agentes aduanales y autoridades portuarias y hacendarias.
Veremos hasta donde actúa la Doctora Claudia Sheinbaum a través del secretario de seguridad pública federal Omar García Harfuch, quien ha demostrado no estar sujeto a tutoriales presidenciales, más bien a lealtad con el país y con la presidenta.
Amigos les dejo como siempre un afectuoso saludo y justo es decir ¡Viva México!