IMPLACABLES LAS EXTORSIONES
CINTARAZOS
Por Guillermo Cinta Flores
Jueves 27 de junio de 2024
Una nota publicada por el diario Reforma este miércoles 26 de junio de la presente anualidad, basándose en datos difundidos por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), indica que el delito de extorsión subió un 50 por ciento durante los casi seis años del régimen de Andrés Manuel López Obrador. Alcanzó una tasa de víctimas de 267 por cada 100 mil habitantes a nivel nacional, es decir, casi nueve por ciento de incremento con relación a 2018.
A lo largo del actual sexenio, verbigracia en el estado de Morelos, se han promovido reformas a las legislaciones penales estatales con el objetivo de endurecer la penalidad del delito de extorsión en sus diferentes modalidades. En nuestro estado las sanciones corporales podrían fluctuar entre 15 y 30 años, dependiendo la gravedad de las extorsiones.
Es importante precisar que algunas de las modalidades de extorsión son las siguientes: engaño telefónico, amenazas telefónicas, montachoques (tan de moda en Ciudad de México), montadeudas (con crecimiento en nuestra entidad), la exigencia bancaria, cobro de piso y los monopolios en distribución de diferentes productos, tal como se repite en estados con alta producción agropecuaria.
Estos ilícitos, que muchas veces tienen desenlaces fatales, como el asesinato de las víctimas, se cometen casi siempre por estructuras criminales, ante lo cual también podrían ser sancionados por la Ley de Delincuencia Organizada. En este ordenamiento debe ser incluido el delito de extorsión.
Lo deseable es que a nivel nacional se unifiquen los tipos penales y las penalidades, así como la reparación del daño a las personas. Sin embargo, las autoridades ministeriales y judiciales encargadas de perseguir y aplicar la ley a los respectivos delincuentes, están rebasadas por la altísima incidencia. Las extorsiones, por lo tanto, avanzan en Morelos de manera implacable.