LA DEUDA DE PEMEX QUE NO SE VE
¡Entre semana!
19 de noviembre 2024
Eduardo Ángel Cinta Flores
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El pasado 19 de abril de 2021 PEMEX publicó el Comunicado No. 118 que consolidaba la cultura de transparencia en sus procedimientos de pago y contratación. PEMEX y la Asociación Mexicana de Empresas del Sector Petrolero A.C. (AMESPAC), sostuvieron una reunión en la que se abordaron los temas de calendarización de pagos de abril y el registro de adeudos de ese año y dejaban base para lo subsecuente.
Durante ese encuentro, encabezado por servidores públicos de la administración de PEMEX e integrantes de la asociación civil, analizaron la Codificación de Pagos y Descuentos (COPADE). De esta manera, PEMEX asumió el compromiso de liquidar los adeudos del ejercicio 2020. Por su parte, los miembros de la AMESPAC agradecieron el avance obtenido hasta ese momento, el cual generaba certidumbre para continuar colaborando con la Empresa Productiva del Estado.
Fue un burdo engaño, a casi cuatro años de que PEMEX hiciera la promesa de “mañana te pago”, la semana pasada trascendió una solicitud de cobranza de una empresa pequeña, de las muchísimas que proveen servicios a Pemex. Tras una breve remembranza de la relación que por años han sostenido, historia en común del empresario y la paraestatal, ahora, aquel, tiene que remitir una seria reclamación de pago ante la indolencia demostrada por la paraestatal en largo tiempo.
Su situación se tornó a grave. Lo que la COPADE exhibía como “nuevo reto”, hoy se presentó como la cancelación de las líneas de crédito de la compañía originando pérdidas severas. El “reto” es que Pemex no ha pagado a miles de proveedores desde mayo y esta empresa, como muchas, ya se encuentra en proceso de quiebra.
El procedimiento de pago de PEMEX es camino azaroso, cuesta arriba y sinuoso.
Pemex primero firma un contrato con el proveedor, le entrega órdenes de trabajo para dar servicios o de entrega de productos. Mensualmente el proveedor estima y concilia con Pemex lo que ha surtido. Posteriormente la empresa recibe un número de pedido y una COPADE, que es el código de pagos y descuentos. Los proveedores dan de alta en el sistema de Pemex esos datos y generan una factura. A partir de ese momento se inicia el plazo para que Pemex les pague.
Ante la necesidad de tener liquidez, los proveedores van a un banco y consiguen créditos de Factoraje convirtiendo sus facturas hasta en un 60% en efectivo sobre el dinero que seguramente cobrarán, ¿Cuándo? Quién sabe.
Ahora no solamente es incierta la fecha de liquidación, sino que Pemex ha recibido de parte del proveedor los servicios, los ha conciliado, pero no le ha correspondido con los Folios de pedido, de COPADE, ni le ha “abierto el sistema” para facturar. Sí los proveedores no facturan, no inicia el plazo de pago. Al no tener el documento mercantil llamado Factura validada por PEMEX, el empresario proveedor no tiene con que negociar un Factoraje Financiero con los bancos.
El Sistema Financiero Mexicano está en alerta para suspender el seguimiento a las cadenas productivas con las empresas del Estado, a considerar como producto financiero al Factoraje con ambas empresas PEMEX y CFE al no tener estas, el poco respaldo del gobierno federal que por el momento no se puede otorgar hasta que el Congreso de la Unión libere el Paquete Económico para el 2025.
La situación económica de PEMEX es muy grave y más grave es para los Contratistas.
Los reportes públicos más recientes de las deudas de Pemex con proveedores son de julio. Dice adeudar más de 125 mil millones de pesos de facturas recibidas en 2023. Y de este año, tendrá unos mil 200 millones, de servicios o materiales que recibió, pero que no se han facturado.
Esa es la punta del iceberg, esa deuda oculta en el reporte oficial: la deuda de lo que no se ha facturado. A los grandes Contratistas, Pemex les debe más de 20 mil millones de pesos. A los pequeños, se calcula en 80 mil millones de pesos. En realidad, solo Dios y Pemex saben cuánto es la deuda que no se ve.
Dentro de esa estadística hay una sub deuda enorme cuyo nombre es “N” ya que se trata de los subcontratistas que no aparecen nominalmente en el sistema de PEMEX. Ellos son los que la están pasando realmente mal, no tienen forma de financiarse por medio del Factoraje, ya que no cuentan con la dichosa Factura validada por PEMEX.
Sabemos que muchos pequeños empresarios que están en ese submundo de PEMEX han recurrido a financiamientos Simples, Personales, o con garantía inmobiliaria para poder subsistir hasta febrero del 2025 que es el esperanzador vaticino de pago.
Para colmo de males el día de hoy aparece en REFORMA una nota que demuestra que la corrupción continúa haciendo mella a la deteriorada PEMEX.
Gerardo Sánchez Zumaya, un potosino propietario de la empresa PETROGESA, recibió contratos de Pemex entre 2021 y 2024, fue denunciado penalmente por operar una presunta red de lavado con negocios con la paraestatal. Está denunciado por el presunto saqueo de 15 mil millones de pesos mediante contratos irregulares para suministrar materias primas que la petrolera usa para el procesamiento de combustibles.
La esperanza de los empresarios es que el cambio de gobierno se estabilice, que se apruebe el Paquete Económico, antes de que repercuta en el paro de la producción de Pemex, o parte de ella, por empresas que no pueden operar ya que no tienen para pagar nóminas caídas y mucho menos la próxima nómina.
Mientras tanto el subsidio del IEPS no está operando desde hace tiempo y, hoy se enmarca en una realidad que a todos los consumidores de combustible nos duele y … nos va a doler, el gasolinazo se ha aplicado y … ¿nos dimos cuenta?
Amigos como siempre les dejo un saludo ¡con mucho afecto!