LA ETERNA TENTACIÓN DEL PREDIAL: ¿SOLUCIÓN FÁCIL O GOLPE A LA ECONOMÍA FAMILIAR?
CINTARAZOS
Por Guillermo Cinta Flores
Viernes 10 de enero de 2025
En la búsqueda constante de aumentar sus ingresos, muchos ayuntamientos en México recurren a una vieja conocida: la actualización catastral.
Si bien es cierto que las tablas catastrales deben reflejar el valor real de los inmuebles, la tentación de utilizarlas como una herramienta para aumentar la recaudación del impuesto predial es grande, y en ocasiones, se convierte en la salida fácil ante la falta de estrategias más creativas y eficientes.
El caso del Ayuntamiento de Cuernavaca, que actualmente estudia esta posibilidad, nos invita a reflexionar sobre las implicaciones de esta medida y sus posibles consecuencias.
Por un lado, es innegable que un catastro actualizado permite una recaudación más justa y equitativa del impuesto predial. Si los valores catastrales no se ajustan a la realidad del mercado inmobiliario, se genera una disparidad en la que algunos propietarios pagan menos de lo que deberían, mientras que otros cargan con una mayor responsabilidad fiscal.
Sin embargo, un aumento repentino en el impuesto predial puede afectar significativamente la economía familiar, especialmente en un contexto de incertidumbre económica como el actual. Las familias, que ya enfrentan el aumento en el costo de la vida, podrían verse obligadas a realizar sacrificios importantes para cumplir con sus obligaciones fiscales.
Es crucial que los ayuntamientos, incluyendo el de Cuernavaca, actúen con responsabilidad y transparencia al abordar la actualización catastral. No se trata simplemente de aumentar la recaudación a costa de los ciudadanos, sino de encontrar un equilibrio entre las necesidades financieras del municipio y la capacidad económica de los contribuyentes. Es fundamental que se implementen mecanismos de diálogo y consulta ciudadana, que permitan a los ciudadanos expresar sus inquietudes y participar en la toma de decisiones.
En definitiva, la actualización catastral es una herramienta importante para la gestión municipal, pero no debe convertirse en un arma de doble filo que termine perjudicando a los ciudadanos. Es necesario que los ayuntamientos exploren otras alternativas para fortalecer sus finanzas, como la eficiencia en el gasto público, la diversificación de sus fuentes de ingresos y la promoción de la inversión. Solo así se podrá garantizar un desarrollo municipal sostenible y equitativo, que beneficie a todos los ciudadanos.