La problemática de las pensiones en México y Morelos: retos, desafíos y posibles soluciones
LA CRÓNICA DE MORELOS. Lunes 28 de octubre de 2024.
La situación de las pensiones en México ha sido un tema de gran controversia y preocupación tanto para la población trabajadora como para los gobiernos a nivel federal y estatal. En Morelos, como en otros estados, el sistema de pensiones enfrenta serios desafíos derivados de la baja cobertura, insuficiencia financiera y complejidades administrativas.
La evolución del sistema de pensiones en México ha transitado desde los esquemas de beneficio definido (1970-1997), hasta la introducción del sistema de contribución definida (AFORE) en 1997. Sin embargo, las dificultades de cobertura persisten, ya que solo una fracción de la población trabajadora, especialmente en la economía formal, tiene acceso a una pensión. A pesar de las reformas, el sistema actual sigue mostrando lagunas, como los bajos montos de retiro y la insuficiente cobertura para la población en la informalidad.
En Morelos, los trabajadores enfrentan problemas particulares en su sistema de pensiones. Las deudas acumuladas en el sistema estatal y las limitaciones presupuestales dificultan financiar las pensiones de los trabajadores del sector público. La falta de recursos y los ajustes en el presupuesto restringen la capacidad de cumplir con los compromisos de pensiones en el estado.
FACTORES QUE AGRAVAN EL PROBLEMA
Economía informal: Un alto porcentaje de la población activa en Morelos trabaja en la informalidad, lo que reduce su posibilidad de cotizar para una pensión.
Envejecimiento de la población: La transición demográfica en México y Morelos está generando una población envejecida sin una base sólida de contribuyentes jóvenes.
Bajos salarios y cotización insuficiente: Los salarios bajos y el empleo irregular contribuyen a una cotización menor, lo que se traduce en pensiones insuficientes para los trabajadores.
Corrupción y mala gestión: Problemas de corrupción en la administración de recursos también han afectado la solvencia de algunos sistemas de pensiones.
Esta situación afecta a los jubilados que dependen de su pensión para subsistir. La insuficiencia en los pagos limita su calidad de vida y existe el riesgo de que algunos adultos mayores caigan en la pobreza debido a pensiones reducidas o demoras en los pagos.
PROPUESTAS Y SOLUCIONES
Reformas el Sistema de AFORES: Se han planteado propuestas para mejorar las pensiones en México, incluyendo el aumento de contribuciones patronales y el fortalecimiento de los sistemas de ahorro.
Iniciativas estatales en Morelos: Revisión de propuestas de ley y programas estatales para apoyar a jubilados, como posibles subsidios o estrategias para mejorar la administración de los fondos de pensiones.
Educación financiera: Fomentar una cultura de ahorro desde una edad temprana y promover la educación financiera entre los trabajadores.
Es urgente enfrentar la problemática de las pensiones para asegurar una vejez digna para todos los ciudadanos, tanto en México como en Morelos. La colaboración entre el gobierno, sector privado y sociedad civil es fundamental para avanzar hacia un sistema de pensiones justo y sostenible.
LOS FUNCIONARIOS Y LAS EXORBITANTES JUBILACIONES
El fenómeno de funcionarios que buscan acumular antigüedad en la administración pública estatal y municipal para una pensión elevada afecta gravemente el presupuesto de las administraciones en varios niveles y tiene consecuencias económicas y sociales a largo plazo.
Cuando los funcionarios se “incrustan” en puestos públicos con el único fin de generar antigüedad, crean una carga financiera adicional en el presupuesto de Morelos. Al jubilarse, muchos de estos funcionarios obtienen pensiones elevadas que representan un egreso constante para la administración. Esto reduce la capacidad de inversión en otras áreas prioritarias, como infraestructura, salud, educación y programas.
En muchos casos, estos funcionarios no han realizado contribuciones proporcionales a sus beneficios futuros, generando un desequilibrio entre los recursos recaudados y las obligaciones de pensión. Esto se debe a que las pensiones se calculan con base en los últimos salarios, que suelen ser elevados. Infinidad de ex funcionarios de primero y segundo nivel hoy reciben ofensivas cantidades de dinero, mes a mes.
Esta falta de contribuciones adecuadas no solo crea una presión financiera, sino que también hace que el sistema de pensiones sea insostenible.
Cuando los ciudadanos ven que funcionarios públicos utilizan sus cargos para obtener beneficios personales a través de pensiones elevadas, se erosiona la confianza en las instituciones gubernamentales. Esto afecta la percepción de legitimidad del sistema de pensiones. Además, fomenta una cultura de aprovechamiento que podría influenciar a otros empleados públicos a replicar estas prácticas, creando un ciclo bastante pernicioso.
Los puestos ocupados por estos funcionarios podrían ser aprovechados por profesionales más jóvenes o con mayor compromiso, quienes pudiesen aportar innovación y efectividad en el servicio público. Esta práctica limita las oportunidades laborales de nuevas generaciones, que podrían hacer contribuciones valiosas al estado y así fortalecer el funcionamiento administrativo.
La alta proporción del presupuesto asignado a estos funcionarios jubilados limita la capacidad de aumentar pensiones para otros trabajadores con menores ingresos, quienes podrían enfrentar dificultades económicas durante su jubilación. Esta disparidad crea un sistema inequitativo y genera tensiones entre los trabajadores activos.
La práctica de acumulación de antigüedad para obtener pensiones elevadas tiene efectos dañinos en la sostenibilidad financiera de las administraciones de Morelos. Además de comprometer el presupuesto, afecta la percepción ciudadana y limita los recursos para sectores con necesidades apremiantes.