MARGARITA Y EL PPV EN EL CONGRESO LOCAL
CINTARAZOS
Por Guillermo Cinta Flores
Viernes 20 de septiembre de 2024
He escrito muchísimas columnas refiriéndome a los vicios de los legisladores mexicanos. Los ínclitos diputados adscritos en el Congreso de Morelos no escapan de ello. La inmensa mayoría está cortada con la misma tijera, pues se sienten intocables, impunes y poderosos. Esto los hace caer en graves defectos o vicios, como son la prepotencia, la pedantería y el abuso. Es una actitud reprobable que, por desgracia, se observa tanto en partidos grandes como chicos. Sin temor a equivocarme puedo asegurar que tales vicios existen en todos los grupos parlamentarios del Congreso local.
Que conste: la LVI lleva escasas semanas de haber iniciado (el 1 de septiembre pasado), pero ya surgieron quienes suponen que el cargo es eterno. Están bastante equivocados. No es un privilegio, no es un feudo, la curul no los hace impunes y, en cambio, les obliga a responder, ante todo, al electorado que votó por ellos.
Infortunadamente para los morelenses, los ínclitos diputados de la LVI Legislatura tienen entre sus facultades la de nombrar a un importante número de servidores públicos y recibir los proyectos de Presupuesto de Egresos y Ley de Ingresos turnados por el Ejecutivo. Esto, la entrega del Paquete Económico 2025, deberá ocurrir a más tardar el 15 de noviembre de este año, para lo cual la nueva administración, cuya máxima responsable será Margarita González Saravia, teóricamente ya debería estar trabajando para diseñar proyectos financieros tendientes a conseguir el desarrollo integral de Morelos. Se supone que el actual gobierno, que culminará el último minuto del próximo 30 de septiembre, ya presentó a la mandataria electa un expediente conteniendo un bosquejo sobre el nuevo paquete financiero, basado en la realidad económica del régimen.
Pero en el Congreso, donde imperan la confusión y el prematuro divisionismo, ciertos personajes han externado de manera privada la forma en que pudieran sacar raja de la situación mediante negociaciones discrecionales con Margarita González Saravia. En tiempos pasados, cuando pudo haber fructificado ese tipo de componendas, se les llamó Pago por Evento o PPV (Pay Per View). Es decir: Tanto pides, tanto quiero. O como diría mi abuelita: El interés tiene pies.
Lamentablemente para los flamantes legisladores, se nota que desconocen la esencia de Margarita González Saravia, quien el pasado 10 de septiembre, durante un encuentro con abogados, les lanzó la siguiente advertencia: “Mi gobierno será implacable contra la corrupción y no toleraré, ni fomentaré prácticas corruptas (…) Mi gobierno será de diálogo, apertura, inclusión y de lucha contra la corrupción en todos los niveles; como les he dicho a los diputados, prefiero quedarme sola en mi posición a darle dinero a cualquiera de ellos por un voto. ¡No lo voy a hacer!”.
En el Congreso, según Radio Pasillo, ya se decantaron dos grupos: el G-12, integrado por Morena y sus aliados; y el G-8, conformado por el resto, donde tienen mayor peso específico los panistas. Lo deseable es que, entre el 1 de octubre, cuando será la toma de protesta de Margarita González Saravia, y el 15 de noviembre, predomine el cabildeo, sin componendas, y el proceso de debate en torno al Paquete Económico 2025 tengan realmente como principales destinatarios, no los intereses de ningún legislador, sino a todos y cada uno de los morelenses. A ver.