NISSAN: LA FALTA DE TRABAJO PREVENTIVO Y PROGRAMAS PROACTIVOS
PERSPECTIVA
Por Marcos Pineda Godoy
Lunes 4 de agosto de 2025
¿Vale la pena el intento por retener la inversión de Nissan México en el estado de Morelos, en otras palabras, de convencerla de no trasladar las líneas de producción a otra planta del país? Sí, por supuesto, debe hacerse, porque son miles los empleos directos e indirectos que dependen de ello, así como el desempeño de una parte importante de la economía interna.
Sin embargo, el ofrecimiento de apoyo gubernamental para lograrlo tendría que ser sólido y de largo plazo, acorde y suficiente, para cumplir las expectativas de mejora en las condiciones de competitividad en que la empresa ha justificado su decisión. Eso tendría un costo elevado para la Hacienda Pública local y federal. No obstante, si ese respaldo fuera posible, sería, de entrada, muy recomendable.
Nissan mexicana ha decidido cerrar su planta CIVAC, no por las circunstancias de seguridad en la entidad ni por nada relacionado con directamente con Morelos, en lo particular. Como las demás grandes corporaciones transnacionales, y así lo hicieron explícito sus representantes en México, se han visto obligadas a reestructurar sus operaciones para subsistir en los mercados globales. Y si bien los planes que ya venían trabajando desde el año 2020 pronosticaban estas decisiones para instrumentarse hasta el 2027, se adelantaron por las políticas arancelarias de Donald Trump.
La responsabilidad de la situación internacional actual de Nissan es pura y exclusivamente de su directiva. Las decisiones que ha tomado en las últimas décadas son de su gobierno corporativo y de nadie más. No es de los trabajadores ni de los gobiernos. Tomarlas como pretexto para atacar o señalar al gobierno es un despropósito, carente de fundamento alguno. Esa sí es pura politiquería.
Si acaso, reparar en la inacción y en la falta de políticas públicas para la atracción de inversiones extranjeras efectivas, en el ramo automotriz, de los más recientes sexenios y particularmente del inmediato anterior. Durante seis años, las autoridades se durmieron en sus laureles y desperdiciaron las múltiples oportunidades que ofreció la relocalización de plantas productivas en proceso de expansión, que sí fueron aprovechadas en otros países, de donde vienen las nuevas marcas que tanto mercado han ganado, cuyos automóviles vemos ya más y más en las calles.
A partir del caso de Nissan quizá, entonces, valga la pena que la secretaría de Desarrollo Económico lleve a cabo un trabajo preventivo de la revisión de las condiciones y de los retos que enfrentan las industrias asentadas en la entidad y el establecimiento de relaciones institucionales, generando programas proactivos, para acompañarlos en su permanencia a largo plazo.
Y PARA INICIADOS:
No hay pretexto para justificar los excesos que vimos en el video donde presuntamente un grupo de seguridad del bar Runa golpean a unos jóvenes. Tampoco lo hay para la ausencia de oficiales de la Policía Preventiva de Cuernavaca a esas horas y en esa zona. Hace falta que haya una denuncia y la investigación de los hechos, pues esta empresa del chupe se deslinda con el argumento de que los hechos ocurrieron en la vía pública, así como que la autoridad aporte una versión oficial. De momento, la impresión que nos queda no es de seguridad para los asistentes a la plaza comercial ubicada en la Av. Teopanzolco 307, en lo general, ni al bar Runa, en lo particular. La recomendación es simple: ni se pare por ahí.
La información es PODER!!!