No en todas las casetas de CAPUFE regirá la estrategia denominada “Cero Efectivo”, solo con uso de TAG IAVE
La afirmación de que Caminos y Puentes Federales (CAPUFE) dejará de aceptar pagos en efectivo en todas sus casetas no es completamente cierta. Lo cierto es que ese organismo está implementando una estrategia llamada “Cero Efectivo”, que busca eliminar el pago en efectivo en la mayoría de los carriles de sus casetas, pero no en todas. Algunas casetas mantendrán carriles habilitados para pagos en efectivo, aunque serán una minoría. Esta transición forma parte de un esfuerzo de modernización para agilizar el tránsito vehicular y mejorar la seguridad al reducir el manejo de dinero físico.
La medida sí tiene como objetivo acelerar el tránsito, reducir tiempos de espera y digitalizar los sistemas de pago. El TAG IAVE (Identificador Automático de Vehículos) será el principal método de pago, aunque otros dispositivos electrónicos compatibles, como PASE, TeleVía y ViaPass, también serán aceptados siempre que estén activados y con saldo disponible. No se ha especificado una fecha exacta para la implementación total de esta medida, pero CAPUFE recomienda adquirir el TAG IAVE con anticipación para evitar inconvenientes.
Por lo tanto, se exagera cuando se afirma que el pago en efectivo será eliminado en todas las casetas, pero es correcto en cuanto a la intención de modernizar y priorizar el uso del TAG IAVE.
El TAG IAVE tiene un costo de 80 pesos (con IVA incluido, aunque algunas fuentes mencionan hasta 150-180 pesos en puntos de venta físicos) y puede adquirirse en línea a través del sitio oficial de CAPUFE (https://iave.capufe.gob.mx:8080/TiendaIAVE/), en módulos en autopistas, o en tiendas como OXXO, Walmart, Soriana, 7-Eleven, entre otras. Los usuarios pueden optar por modalidades de prepago (recargas previas) o pospago (vinculación a una cuenta bancaria).
El uso del TAG IAVE permite cruces automáticos sin detenerse, lo que reduce significativamente las filas en las casetas, especialmente en temporadas altas como vacaciones o fines de semana largos. Esto mejora la experiencia de los conductores y agiliza el tránsito en autopistas clave como la México-Cuernavaca o México-Puebla.
Al eliminar el manejo de efectivo, se reduce el riesgo de robos o asaltos en las casetas, tanto para los usuarios como para los trabajadores. También minimiza el contacto físico, lo que puede ser beneficioso en términos de higiene.
La medida alinea a México con estándares internacionales de telepeaje, mejorando la infraestructura tecnológica de las autopistas. Esto permite una mayor trazabilidad de los pagos y un control digital de los gastos de los usuarios.
El TAG IAVE y otros dispositivos compatibles pueden recargarse en línea, en tiendas de conveniencia o vincularse a cuentas bancarias, ofreciendo flexibilidad. Además, la aplicación de IAVE permite consultar saldos, historial de cruces y activar alertas de saldo bajo.
Al disminuir la necesidad de personal para manejar efectivo, CAPUFE puede optimizar recursos y reducir costos operativos, lo que podría traducirse en una mejor mantenimiento de las autopistas a largo plazo.
Contras de la medida
No todos los conductores tienen acceso a medios digitales o tarjetas bancarias, especialmente en zonas rurales o entre poblaciones de bajos ingresos. Esto podría excluir a algunos usuarios o generar dificultades para quienes no están familiarizados con la tecnología.
Aunque el costo del TAG IAVE (80-180 pesos según el punto de venta) no es elevado, representa un gasto adicional para los conductores. Además, los usuarios deben asegurarse de mantener saldo suficiente o vincular una cuenta bancaria, lo que puede ser un inconveniente para quienes no planifiquen con anticipación.
La falta de una fecha exacta para la eliminación total del efectivo puede generar confusión entre los automovilistas. Durante la etapa de transición, aquellos sin TAG podrían enfrentar largas filas en los pocos carriles que aún acepten efectivo.
El sistema de telepeaje depende de lectores electrónicos y conectividad. Fallos técnicos, como problemas con los lectores o falta de saldo en el TAG, podrían causar retrasos o impedir el paso en carriles exclusivos.
En México, el pago en efectivo es un hábito arraigado, especialmente en regiones donde el uso de tecnología es menos común. La transición podría generar resistencia o rechazo entre algunos conductores.
La estrategia “Cero Efectivo” de CAPUFE es un paso hacia la modernización, pero su éxito dependerá de la implementación y de la capacidad de CAPUFE para educar a los automovilistas y garantizar una transición fluida. La recomendación de adquirir el TAG con anticipación es clave, ya que la falta de preparación podría generar congestión en los carriles de efectivo durante la fase inicial. Además, es crucial que CAPUFE amplíe los puntos de venta y recarga del TAG IAVE, especialmente en zonas rurales, para evitar la exclusión de usuarios sin acceso a plataformas digitales.
Recomendaciones para los conductores
Adquirir el TAG IAVE con anticipación: Se puede comprar en línea en https://iave.capufe.gob.mx:8080/TiendaIAVE/ o en tiendas como OXXO, Walmart, y 7-Eleven.
Activar alertas de saldo bajo: Esto evita contratiempos en carretera.
Familiarizarse con el sistema: Descargar la aplicación de IAVE para gestionar recargas y consultar saldos.
Planificar viajes: Durante la transición, verificar si las casetas del trayecto tienen carriles de efectivo disponibles como respaldo.
La eliminación progresiva del pago en efectivo en las casetas de CAPUFE, con el uso obligatorio del TAG IAVE en la mayoría de los carriles, es una medida real y en proceso, aunque no aplica a todas las casetas, como sugiere la nota original. La iniciativa tiene el potencial de mejorar la eficiencia y seguridad en las autopistas, pero enfrenta desafíos relacionados con la accesibilidad, la transición y la infraestructura tecnológica. Los conductores deben adaptarse adquiriendo y activando su TAG con anticipación para evitar inconvenientes.