NUEVOS DIPUTADOS DE MORELOS: ¿TRABAJAR CONTRA LA MEDIOCRIDAD?
ANÁLISIS
Miércoles 28 de agosto de 2024
Editorial de La Jornada Morelos
Conforme establece la ley, este jueves (mañana) los diputados de la próxima Legislatura deberán reunirse para definir la integración de la Mesa Directiva, y con ello, como en cascada, designar las comisiones y órganos de gobierno y administrativos de la LVI Legislatura del Congreso del Estado de Morelos.
Dicen que la política es el arte de lo posible, que no siempre es lo deseable. De eso Morelos ha tenido demasiado en las últimas legislaturas. Por lo menos en los últimos 20 años, cada edición del Congreso de Morelos ha sido una colección de pifias y escándalos matizada por algunos -muy pocos- aciertos. Como no ha sido posible otra cosa, porque los legisladores históricamente no han querido que así sea, la mediocridad legislativa se convirtió en el modus operandi de un colegiado que fue acumulando enormes desprestigios.
El idealismo sugiere que la política es el arte de hacer posible lo deseable y para eso fue electo cada uno de los diputados al Congreso de Morelos. La misión de la Legislatura que iniciará el domingo empieza por dejar atrás la mediocridad legislativa, los cochupos para negocios personales, la deslegitimación de la representación popular, los acuerdos “en lo oscurito” y en detrimento del bienestar de los morelenses. Para ello, por supuesto, se requiere un cambio en el paradigma de cómo los diputados se conciben a sí mismos (como representantes de un grupo de interés, o peor, de sí mismos), y también un liderazgo diferente, que sume fuerzas en torno a un proyecto para impulsar el desarrollo y bienestar de los morelenses también desde el Legislativo.
Hoy los diputados están en la disyuntiva de designar su Mesa Directiva, la que presidirá y representará al Congreso. La alternativa para los diputados es entre una conducción sensata, racional, constructora de acuerdos, impulsora de leyes y políticas públicas; y otra que significa más de lo mismo, una legislatura que beneficia solo a unos cuantos diputados en detrimento de los intereses de todos los morelenses y que recuerda a la gente apenas cuando hay elecciones o cuando su cálculo político y económico lo permiten (estilo que, por cierto, sepulta las carreras políticas de la mayoría de sus practicantes).
Rafa Reyes representa la primera opción, un político sensato, morelense comprometido con la gente, dialoguista, constructor de mayorías, y cuya ascendencia con el próximo gobierno permitiría que Morelos transitara los caminos que hagan posible lo deseable. El trayecto no es fácil porque en su propia fracción parlamentaria hay quien busca que el Congreso siga siendo un espacio para repartir beneficios personales, para acordar a favor de unos cuantos, para poner trampas y chantajear al Ejecutivo y los grupos parlamentarios. Isaac Pimentel, llevado a Morena desde el PAN por Ulises Bravo, busca sin más mérito que el poder trabar la votación en el Congreso, hacerse de una posición vital para el Congreso, para la política local y para los morelenses. El diputado, colocado en la primera posición plurinominal en las listas de Morena gracias a sus servicios a la administración de Cuauhtémoc Blanco. Su corta carrera política ha mostrado una grave inconsistencia ideológica y una ambición de poder tan grande que pierde de vista los objetivos de tenerlo.
La decisión tendría que ser muy sencilla para los legisladores de quienes se espera honestidad y compromiso con los morelenses. Los veremos el jueves.
Editorial de La Jornada Morelos este miércoles 28 de agosto de 2024. Link con publicación original:
https://www.lajornadamorelos.mx/editorial/el-congreso-aun-podria-salvarse-de-las-pifias/