PUENTES DE COORDINACIÓN: LA GOBERNANZA EN MORELOS ANTE LAS CRISIS SOCIALES
OPINIÓN
Por Guillermo Cinta Flores
Martes 30 de diciembre de 2025
En Morelos, la gobernanza se mide no solo por anuncios grandiosos, sino por la capacidad de respuesta institucional ante las demandas urgentes de la ciudadanía, como la inseguridad y las emergencias cotidianas. Recientemente, la adquisición y entrega de decenas de nuevas patrullas a los 36 municipios representa un esfuerzo concreto por fortalecer la presencia policial en las calles, con una inversión significativa en equipamiento que busca mejorar la vigilancia y la reacción inmediata, en un contexto donde la percepción de inseguridad sigue siendo uno de los principales reclamos sociales.
Estas iniciativas, impulsadas desde el Ejecutivo estatal, se complementan con un énfasis renovado en el diálogo permanente con los ayuntamientos. La coordinación interinstitucional, a través de mesas de seguridad y encuentros directos con alcaldes, pretende superar las tensiones históricas entre niveles de gobierno, fomentando un trabajo conjunto que atienda las causas profundas de la violencia y no solo sus síntomas, aunque persisten desafíos en la alineación efectiva de recursos y estrategias locales.
Por otro lado, las expresiones de solidaridad de la gobernadora Margarita González Saravia ante accidentes y tragedias —como los frecuentes en carreteras o incidentes viales— humanizan la respuesta institucional, recordándonos que la administración pública debe mostrar empatía y cercanía con las víctimas. Estos gestos, aunque simbólicos, contribuyen a reconstruir la confianza ciudadana en un estado marcado por crisis recurrentes.
Sin embargo, estos avances revelan también las tensiones inherentes: la coordinación no siempre es fluida, y las crisis sociales —desde la delincuencia organizada hasta los accidentes prevenibles— exponen brechas en la planeación y ejecución. La entrega de patrullas y el reinicio de diálogos son pasos positivos, pero requieren continuidad y rendición de cuentas para no quedar en meras acciones aisladas.
En última instancia, la verdadera prueba de la gobernanza en Morelos será transformar estos esfuerzos en resultados palpables: menos inseguridad, mejor prevención de riesgos y una administración que priorice el bienestar colectivo. Solo con un diálogo genuino y recursos bien canalizados podremos superar las tensiones y construir un estado más resiliente ante sus desafíos sociales.
