Sedagro garantiza seguridad alimentaria de los morelenses
Con la finalidad de garantizar las buenas prácticas en la producción de los alimentos hasta que llegan a las mesas de las y los morelenses, la titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Sedagro), Margarita Galeana Torres, mantiene una coordinación y comunicación permanente con integrantes de los comités de Sanidad Vegetal, Acuícola y Pecuario de Estado de Morelos, en el que están integrados productores y técnicos especializados en esos temas.
Al asistir a las sesiones de trabajo del Comité Estatal de Sanidad Acuícola del Estado de Morelos (CESAEM), del Comité Estatal de Sanidad Vegetal (CESVMOR), y del Organismo Auxiliar de Sanidad Animal Profesionales Pecuarios de Morelos S.C (PPM), la encargada del sector agropecuario reafirmó su interés en colocar a la sanidad como prioridad, a fin de que los productos agropecuarios de esas tres ramas mantengan los estándares de calidad e inocuidad que demanda el mercado local, nacional e internacional, lo que permite garantizar la seguridad alimentaria.
En este sentido, la cadena de trazabilidad, comienza con el productor de alimentos. Por ejemplo, en el caso de productos del campo es importante asegurar que la semilla sea certificada, que la tierra esté sana, que el agua sea segura para riego, que se realicen prácticas de higiene en las instalaciones y del personal, desinfección de utensilios de trabajo, control y uso apropiado de agroquímicos, e instalaciones seguras, entre otras. Por cuanto al sector pecuario y acuícola, a través de las buenas prácticas se busca obtener alimentos inocuos, aptos para el consumo humano.
Es importante mencionar que la sanidad se refiere a la prevención, control y erradicación de plagas y enfermedades, y la inocuidad es la característica a no causar daño a la salud de las personas.
Por último, la secretaria de Desarrollo Agropecuario expresó su interés en priorizar el Programa Campo Limpio, que tiene el objetivo de minimizar la contaminación del medio ambiente, evitando que los envases vacíos de plaguicidas se tiren en fuentes de agua, se entierren, quemen o reutilicen; el CESVMOR opera dicho proyecto a través del programa inocuidad agrícola.