¡Terror en las calles de Cuernavaca: un asesinato más bajo el manto de la inseguridad rampante!
Los morelenses no se equivocan: desde que el capitán retirado Guillermo García Delgado asumió la titularidad de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano (SEPRAC) el 26 de febrero de 2025, la capital ha sido testigo de un espiral de violencia que parece no tener freno.
Promesas de mayor vigilancia y detenciones masivas —como las 64 personas capturadas presuntamente en operativos recientes— chocan con una realidad alarmante: mantas amenazantes que señalan colusión entre policías y el crimen organizado, investigaciones internas a dos agentes por presuntos nexos delictivos, y un repunte en la delincuencia juvenil desde agosto.
En este contexto de desconfianza y fallas en la estrategia de seguridad, la tarde de este miércoles 15 de octubre se consumó otro crimen que ilustra el caos: un hombre perdió la vida a balazos mientras manejaba su auto en una de las vías más transitadas de la ciudad.
El suceso tuvo lugar en la concurrida avenida Cuauhtémoc, en la colonia Chapultepec, justo frente a una gasolinera y el supermercado Bodega Aurrerá, un punto comercial de alto flujo peatonal y vehicular que debería ser sinónimo de protección, no de muerte.
Según los reportes iniciales de las autoridades, los responsables fueron dos sujetos que se desplazaban en motocicleta, quienes abrieron fuego contra la víctima sin mediar palabra, dejando el vehículo detenido en medio de la vía con el conductor ya sin signos vitales.
Rápidamente, el sitio fue resguardado por un tardío despliegue conjunto de fuerzas de seguridad: elementos de la Policía Estatal de Morelos, la Policía Vial y la Guardia Nacional acordonaron el perímetro para evitar más riesgos y preservar la escena del crimen.
Mientras tanto, investigadores de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y peritos forenses de la Fiscalía General del Estado de Morelos (FGEM) llevaron a cabo las diligencias esenciales: recolección de casquillos, análisis balístico preliminar y el traslado del cuerpo al Servicio Médico Forense para la autopsia.
Hasta el momento, no se ha revelado la identidad de la víctima ni posibles motivos, pero el patrón es claro: sicarios en moto, ataques selectivos y una impunidad que alimenta el miedo cotidiano en Cuernavaca.
Este homicidio no es aislado. Apenas una semana antes, el 7 de octubre, un joven fue abatido presuntamente por policías durante un operativo en Patios de la Estación, un caso que ha desatado protestas y demandas de justicia.
García Delgado, quien niega cualquier vínculo de sus elementos y él mismo con la delincuencia, ha impulsado medidas como la instalación de cámaras en zonas vulnerables. Sin embargo, los habitantes de la “Ciudad de la Eterna Primavera” exigen resultados tangibles, no solo palabras.
¿Cuántas vidas más se perderán antes de que la SEPRAC demuestre que puede blindar a Cuernavaca de esta ola de terror? La ciudadanía clama por acción urgente, antes de que la inseguridad convierta nuestra capital en un campo de batalla.
FOTO PRINCIPAL: MARGARITO PÉREZ RETANA/ LO DE HOY MORELOS