LA MANO FIRME DE MIGUEL URRUTIA LOZANO EN LA SEGURIDAD DE MORELOS
OPINIÓN
Por Guillermo Cinta Flores
Jueves 19 de junio de 2025
Miguel Ángel Urrutia Lozano, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de Morelos, se consolida como un pilar clave en la lucha contra el crimen organizado en el estado. Durante la reciente conferencia de la Mesa de Coordinación Estatal para la Construcción de Paz y Seguridad, Urrutia informó sobre un operativo interinstitucional que desmanteló un narcolaboratorio en Huitzilac, capaz de producir una tonelada mensual de metanfetamina valuada en 300 millones de pesos. Este golpe, ejecutado con precisión junto a la Secretaría de Marina, Defensa Nacional y Guardia Nacional, no solo debilitó a grupos como “Los Mayas y/o Los de Siempre”, sino que evidenció la capacidad de respuesta inmediata de su institución ante la delincuencia, marcando un contraste con otros actores de la Mesa.
Acompañado por el secretario de Gobierno, Juan Salgado Brito, Urrutia subrayó un principio irrenunciable: en Morelos no hay impunidad. Su liderazgo ha impulsado una estrategia que combina inteligencia operativa y coordinación interinstitucional, logrando capturas clave como la de tres individuos en el narcolaboratorio y otros implicados en delitos de alto impacto, como Daniel “N”, alias “El Sinaloa”, ligado a un doble homicidio en Temixco. Estas acciones reflejan un enfoque proactivo que va más allá del discurso, posicionando a la SSPC como primer respondiente en hechos violentos y demostrando resultados tangibles donde otros funcionarios suelen quedarse en la retórica.
El éxito de estas operaciones no es aislado, sino parte de una visión integral que Urrutia ha sabido articular. El operativo en Huitzilac, por ejemplo, se enmarca en un acuerdo interestatal con las gobernadoras de Ciudad de México y Estado de México, mostrando su capacidad para tejer alianzas estratégicas que trascienden fronteras estatales. Este enfoque colaborativo, sumado al aseguramiento de precursores químicos, armas y droga, ha asestado un duro golpe a las redes criminales que históricamente han utilizado Morelos como corredor delictivo. Mientras otros en la Mesa aportan desde sus trincheras, es Urrutia quien lidera con hechos la pacificación del estado.
Con estas acciones, Urrutia Lozano no solo refrenda el compromiso del gobierno de Margarita González Saravia contra el crimen, sino que establece un estándar de eficacia que desafía a sus pares en la Mesa de Construcción de Paz. Su insistencia en la dignificación policial, el fortalecimiento del sistema penitenciario y la presencia territorial permanente son pilares que sostienen una estrategia de seguridad con resultados medibles.
En un estado azotado por la violencia, Urrutia emerge como la figura que, con determinación y claridad, está devolviendo la esperanza de un Morelos más seguro.
